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Leandro Fernández
Periodista
En lo que va de la liga, Instituto tuvo un andar irregular, alternando pasajes de muy buen funcionamiento con momentos de bajo nivel, signados quizás por las lesiones. Fueron contadas las ocasiones en las que el técnico Lucas Victoriano pudo contar con el plantel completo. En distintos momentos, sufrió las bajas de Chiarini, Vicens, Cuello y Gallizi, entre otros.
Sin dudas, el fuerte del equipo está en la ofensiva: es el tercero con más puntos convertidos en la actual temporada y el de mejor porcentaje en triples y en libres. Además, Instituto cuida muy bien la pelota, como lo demuestra la estadística que lo ubica como segundo equipo con menos pérdidas en lo que va del torneo.
La Gloria cuenta con jugadores en un muy buen momento, algunos con presencia en la selección. Nicolás Romano es el segundo mejor tirador de libres, el segundo rebotero defensivo y tiene el cuarto mejor porcentaje en triples de esta temporada. Tayavek Gallizi es el cuarto jugador que más faltas recibió y el noveno con más libres convertidos. El base Martin Cuello es el segundo bombardero de la Liga. Si a eso le sumamos al Chuzito González y a Mateo Chiarini, uno de los escoltas con más proyección a futuro, tenemos a los albirrojos como un equipo a temer.
Ahora, si La Gloria quiere competir con chances serias con Quimsa, Gimnasia o Peñarol, que se muestran como los equipos más sólidos, deberá mejorar en defensa. Instituto recibe un promedio de 80,7 puntos por partido y eso lo ubica en mitad de tabla. Cuando vemos la lucha en los tableros, La Gloria está decimotercero en rebotes totales; un dato curioso ya que tiene jugadores tan destacados como Nicolás Romano, Tayavek Gallizzi y Mariano Fierro en la pintura.
Instituto viene de hacer muy buenas campañas en La Liga: llegó a semifinales de la edición 2017/18 y la final de la 2018/19, cayendo en ambas ante el poderoso San Lorenzo. Además, se sacó la mochila de no haber logrado títulos al ganar el último Súper 20 y eso le da más chapa de candidato. Ahora, La Gloria espera rival proveniente de la reclasificación para los cuartos de final de la Liga Nacional.
Llegó la hora de la verdad y en estos playoffs veremos si esta vez le alcanza a la Gloria para lograr el título. Para eso deberá mejorar ostensiblemente sus números en defensa, mantener su solidez ofensiva y, ¿por qué no?, ligar un poco de suerte para no tener más lesionados.