Independiente de Oliva a un paso de la final
Tercer empate en fila para Racing
Simón Guzmán
Periodista
Sergio Pérez ganó en Mónaco y se quedó con una carrera que al inicio de la jornada parecía ser de Ferrari.
El piloto mexicano logró un gran triunfo en el Gran Premio de Mónaco y selló un gran fin de semana. Con este triunfo mete presión en el campeonato mundial.
La lluvia fue el actor principal del domingo. La carrera se demoró más de una hora debido a la gran cantidad de agua que caía sobre el asfalto monegasco.
Las dos primeras vueltas fueron de la mano del Safety Car. La largada se dio en la tercera vuelta, en movimiento. Todo se desarrollaba de forma normal en los primeros giros y Leclerc comenzaba a escaparse en la punta.
La lluvia paraba y el circuito comenzaba a secarse rápidamente. Empezaban a verse las estrategias de los equipos. Los del fondo ingresaban a boxes para cambiar las gomas de lluvia, a diferencia los líderes de la carrera, que no lo hacían. Todos esperaban para ver quién daba el paso hacia los pits.
En la vuelta 14, Leclerc ya le sacaba más de cinco segundos a Sainz, con un gran trabajo de equipo. El español demoraba a los Red Bull, mientras Charles se escapaba en la cima. Pérez le avisaba al box que ya no se podía correr con neumáticos de lluvia.
En esas vueltas, al espectáculo de la carrera lo ofrecía Gasly quien se sacaba de encima a Zhou y Ricciardo. El francés de Alpha Tauri ya había cambiado los neumáticos de lluvia y la diferencia se notaba.
Ferrari cometió un gran error: volvió a llamar a Leclerc a box y el monegasco quedó quinto. Y Charles explotó contra su equipo por la radio, ya que este mal entendido podría costarle la carrera al piloto local.
En la vuelta 25, Checo Pérez era el líder de la jornada y Sainz lo apretaba de gran manera. En la segunda fila, Leclerc iba por Verstappen y la carrera se tornaba apasionante.
Mick Schumacher sufrió un choque fuerte y apareció el safety car. El auto se partió totalmente pero el piloto no sufrió ningún tipo de lesión. Los restos en el circuito eran muchos por lo que la carrera se tuvo que detener. Apareció la bandera roja en la vuelta 30, los pilotos a los boxes y a esperar. Quedaban 47 vueltas por correr.
Vuelta a la acción
La carrera se reanudaba y Red Bull colocaba neumáticos medios mientras que Ferrari optaba por los duros. Distintas estrategias pensaban los equipos dominantes.
Cuando la carrera iba por la vuelta 32, se comunicó que restaban 35 minutos de competencia por lo que ya no se contaban las vueltas. Esto se debe a que no se pueden superar las tres horas contando desde el horario de inicio de la jornada.
Mientras tanto, Sainz presionaba a Pérez a una diferencia de 0,7. Verstappen y Leclerc venían tercero y cuartos cómodos. A falta de 25 minutos el neerlandés comenzó a presionar a Sainz. Max quería el segundo lugar e iba por ello. Por su parte, Leclerc quedaba lejos de Verstappen pero guardaba gomas para el final.
Faltando 13 minutos, comenzaban a apretar los Ferrari, con los neumáticos duros. Leclerc quedaba a 1.1 de Verstappen mientras que Sainz quedaba a 0.6 de Pérez. Se asomaba un final de película.
La carrera iba a cerrarse de la misma manera. Pérez resistiendo a Sainz y Verstappen apretando. Fue un gran final, pero ya no se generarían sobrepasos entre los líderes.
De esta forma, Checo Pérez consiguió un auténtico triunfazo. Supo proteger su posición y nunca bajó el ritmo. Un “señor triunfo” para un piloto que lo merecía como nadie. Sainz fue segundo y Verstappen consiguió cerrar el podio. Leclerc fue la decepción del domingo, terminando cuarto.
Con este resultado, Verstappen sigue sacando diferencia en el campeonato. Si Ferrari quiere darle pelea deberá prestar más atención, porque errores como los de hoy pueden costarte caro en un futuro.